Eveleigh y David van a tener un bebé, por lo que deciden mudarse a una
tranquila casa en un viñedo, abandonando el estrés que supone vivir en
la ciudad. Sin embargo, allí Eveleigh comienza a escuchar extraños
ruidos y a tener tétricas visiones de una siniestra figura encapuchada.
Nadie más lo ve ni lo oye, ni siquiera su marido, que cada vez está más
preocupado por el bienestar de su esposa. Desesperada por demostrar su
cordura, Eveleigh investiga el misterioso pasado de la viña, que pondrá
su vida y la de su futuro hijo en peligro…